He aquí un programa dedicado por completo al apogeo del Clasicismo vienés, con música de Mozart y su sucesor Beethoven. La Gran Misa n.º 17 en do menor de Wolfgang Amadeus Mozart fue compuesta entre 1782 y 1783. Mozart la compuso por iniciativa propia. Fue la primera misa que compuso sin tratarse de un encargo, y lo hizo como voto por su reciente matrimonio con Constanze Weber (que además cantó como soprano solista en el estreno). Es una de las obras sacras más importantes de Mozart, junto con su Réquiem, que compuso siete años más tarde. La Sinfonía n.º 7 en la mayor, Op. 92 de Ludwig van Beethoven se redactó entre 1811 y 1812; el estreno se celebró el 8 de diciembre de 1813 en la Universidad de Viena. El propio Beethoven, ya en acusado estado de pérdida auditiva, dirigía una orquesta repleta de compositores ilustres, como Spohr, Meyerbeer, Giuliani,  Hummel, Moscheles, Dragonetti, Romberg y, como concertino, el viejo Antonio Salieri, que fuera, precisamente, el rival mítico de Mozart.